Erotismo y la pornografía adulta en el cómics

Posted by Selket Perez on April 9th, 2019

Una visión general del erotismo y la pornografía adulta en el cómics.

Desde el momento en que los artistas del cómic aprendieron a manejar un lápiz, muchos han usado su talento para dibujar escenas sexuales en culturas de todo el mundo. Para algunos esto fue solo una etapa, pero para otros ha sido una producción profesional, que entretiene y satisface una audiencia de millones de fanáticos de las artes gráficas.

Los cómics con contenido sexual siempre están vinculados, o al menos influenciados, por los tabúes culturales actuales.

Según las opiniones vigentes sobre lo que se tolera o no, los cómics sexuales se venden por encima o por debajo del mostrador dependiendo de las leyes de cada país.

La imagen de senos descubiertos no es tan importante en Europa occidental, donde la desnudez femenina se usa para vender cualquier cosa, desde champú hasta coches, pero en los Estados Unidos, los senos desnudos se asocian con el sexo , por lo tanto, están prohibidos de la exhibición pública. En Japón, muchos cómics sexuales (manga) tratan sobre adolescentes o menores de edad, cuya representación se considera pedofilia en la mayoría de los cómics occidentales.

Esto demuestra que lo que se considera excitante en una cultura, puede verse como criminal en otra.

Cómics eróticos

Para la mayoría de los artistas, “erótico” significa la representación de lo que despierta en ellos/as su deseo sexual, que generalmente es una hermosa mujer u hombre, con poca o ninguna ropa puesta.

Los artistas cómicos se suman a la atmósfera cargada de sexo dibujando sus fantasías eróticas en historias emocionantes.

Las cualidades artísticas de muchos cómics eróticos son muy altas, y muchos artistas se han ganado una reputación respetable en este género.

El cómic ha retratado con gran belleza el erotismo, como el cine, la fotografía o la literatura, pero con la particularidad de su lenguaje, que le ha ofrecido oportunidades más versátiles en el arte de sugerir, con la infinita libertad del novelista y la destreza del ilustrador, intérprete preciso de la anatomía humana.

Los juguetes eróticos y los sexshop son hoy todavía al día de hoy un tabú en la sociedad actual.